QUIENES SOMOS

El gobierno está ignorando todas las advertencias. Sigue alimentando la crisis climática y nos ha llevado al borde de un abismo.

Ya no estamos dispuestos a aceptar este crimen contra la humanidad sin ofrecer resistencia. No esperaremos mientras un Estado tras otro colapsa. Al final todos estamos en peligro. Somos la voluntad de supervivencia de esta sociedad.

Antes de las elecciones federales de 2021, una huelga de hambre sacudió al país y provocó que uno de los primeros nombramientos del nuevo canciller Olaf Scholz fuera hablarnos sobre la catástrofe climática. Dado que la Canciller no era consciente de la amenaza existencial que representaba la emergencia climática para la sociedad, a principios de 2022 personas bajo el nombre de Última Generación comenzaron a bloquear la autopista más transitada de Alemania.

Desde entonces volvemos una y otra vez a Berlín y bloqueamos la A100 y otras carreteras importantes. No nos gusta hacer eso. Pero consideramos que esta resistencia civil es nuestra mejor oportunidad para lograr el necesario cambio de rumbo en nuestro rumbo destructivo.

Durante semanas, la gente también cerró una y otra vez los oleoductos. Los bloqueos de carreteras en Fráncfort del Meno, el corazón de la locura de los combustibles fósiles para financiar la destrucción de nuestro futuro con miles de millones, llevaron a decenas de personas bajo custodia policial durante hasta una semana. En Munich, las personas fueron detenidas repetidamente durante largos períodos de tiempo para impedirles protestar, a veces durante hasta 30 días seguidos.

Somos la última generación que puede detener el colapso de nuestra sociedad. Frente a esta realidad, aceptamos sin temor altos honorarios, acusaciones penales y encarcelamiento.

La Última Generación forma parte de una red internacional de proyectos de resistencia civil desde abril de 2022. se llama asi Red A22.